Siempre se ha pensado que la Educación Vial es una materia que esta relacionada con el mundo de la escuela y sólo en ella y en ese periodo de la vida, las personas se educan vialmente y que, en el mejor de los casos, los adultos vuelven a tener contacto con ella cuando obtienen el permiso de conducción en la autoescuela.
El concepto ha cambiado y se considera que la Educación Vial es un proceso que se inicia a la edad más temprana posible pero que se prolonga a lo largo de toda la vida. Los objetivos que pretende alcanzar es que los ciudadanos circulen con seguridad y fluidez por las vías pública en cualquier situación y circunstancia, no sólo como conductor, sino también como peatón o usuario de los transportes públicos o privados. Te presentamos a continuación una serie de materiales que te pueden ayudar en tu Educación Vial o para ayudar a los menores de la casa, ya que, como adultos, siempre tenemos la responsabilidad de su educación, ya sean hijos, sobrinos, nietos, o hermanos pequeños.
En Seguridad Vial, como en la mayoría de ámbitos, la edad no significa, necesariamente, un estado psicofísico, y de hecho, en ocasiones personas de mayor edad presentan mejores condiciones que otras con edades cronológicas más bajas. Los mayores de nuestra sociedad, con quienes compartimos este tiempo de la historia, han sido testigos de épocas menos avanzadas, donde la seguridad, incluso la supervivencia se movía en niveles, que en la actualidad, nos cuesta imaginar.
Hoy, conviven con nuevas necesidades, y precisan un esfuerzo de adaptación para convivir con vehículos vías y más sofisticados. Es responsabilidad de la sociedad facilitar su adaptación, compartir su esfuerzo y es responsabilidad de los mayores reconocer y admitir esas necesidades.